Vaya por Dios, otro post para venderme humo, estarás pensando en este momento. Pues no. De hecho, el título es mentira. Las claves para el éxito en eCommerce, como los mandamientos, se resumen en una sola: trabajo. Muuuuucho trabajo. Si te has creído que vender online es fácil, rápido y barato, mi consejo es que te vayas quitando la idea de la cabeza. Quien quiera que te haya vendido que esto es llegar y vender, lamento decirte que te ha mentido cochinamente.
Ahora que, por fin, la mayoría del comercio minorista se ha lanzado al eCommerce, aunque sea porque las circunstancias que vivimos no les han dejado otro remedio, empezamos a encontrarnos en una situación nueva. Nueva en el eCommerce para pymes, pero más vieja que (como dicen en mi pueblo) los chorricos del parque: la selección natural.
Estamos empezando a pasar de una escasez de oferta local en eCommerce (algo por lo que Amazon daba volteretas en el aire de pura felicidad) a un más que probable exceso de oferta local en eCommerce (algo por lo que Amazon da triple saltos mortales de felicidad, porque incorpora más clientes al canal online en el que es el rey). En esta situación, que probablemente se consolide a lo largo de 2021, sólo los que sean capaces de hacerlo muy bien sobrevivirán. Esto es como en Los Inmortales: Sólo puede quedar uno. Bueno, no tanto, pero casi.
Así que si esperas que te hable de engagement, de optimizar el funnel de conversión o de monitorizar tus KPIs, estás en el post equivocado. No es que no haya que hacer todo eso y más, pero si ya hemos dicho que la clave del éxito en eCommerce es el trabajo, vamos a partir de ahí y no permitir que los árboles no nos dejen ver el bosque. En mi día a día como consultor y formador me he encontrado con personas que tienen un pequeño eCommerce y que dominan el SEO, el análisis de un montón de parámetros… y cuya web es un desastre que no hay por dónde coger. Pongamos primero los bueyes y luego, si tal, el carro.